Nos hemos acostumbrado tanto a ver los seguros tal y como nos los presentan las aseguradoras que perdemos la perspectiva sobre cómo son en realidad: cuales son las garantías obligatorias que deben contener y cuáles las opcionales.
Una cosa es el seguro de moto o coche al uso que puedes encontrar en el mercado, otra el que debes tener como mínimo por ley y otra el que puedes configurar a tu medida. Las garantías que incluya la póliza serán las que determinen tu nivel de cobertura y por lo tanto el tipo de seguro que tienes.
Lo que debes tener claro es que los seguros cambian, que lo que hoy ves como un mínimo no lo era hacer unos años y seguramente no lo será en el futuro. Dicho de otra forma, las aseguradoras adaptan su oferta primero a los cambios normativos y segundo a los cambios de la sociedad.
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El seguro de moto obligatorio
Hasta principios de los años 60 el seguro de coche y moto era opcional y no obligatorio. A efectos prácticos esto quería decir que, en caso de accidente, el conductor era responsable de los daños ocasionados y debía responder con todo su patrimonio. La traducción es que conducir era una actividad de alto riesgo financiero porque un pequeño golpe podía dejar a una persona en la ruina.
La respuesta a esta situación llegó en 1962. La Ley 122/1962, de 24 de diciembre, sobre Uso y Circulación de Vehículos a Motor hizo obligatorio el seguro de circulación, aunque su entrada en vigor no se produjo hasta 1965.
El seguro obligatorio debe cubrir los daños materiales a terceros –aquí te contamos quien es un tercero para tu aseguradora-. Es lo que se conoce como responsabilidad civil y que define «la obligación de reparar los daños y perjuicios ocasionados a un tercero en su persona o bienes por causa de una acción u omisión o de un tercero por el que debe responderse con culpa o negligencia», según indica ICEA.
Las cuantías del seguro obligatorio han ido cambiando con el tiempo, pero actualmente son de 70 millones de euros para los daños personales y de 15 millones para los materiales. Estas son las cantidades que todo seguro de moto o coche debe cubrir.
La ley prevé que se cubran tanto los daños a personas (personales) como a las cosas y animales, que se consideran daños materiales. En caso de conflicto, prevalecerán siempre las personas sobre los materiales.
Por qué es obligatorio
La cobertura de Responsabilidad Civil es obligatoria para asegurarse que, en caso de accidente, las personas afectadas siempre sean indemnizadas, independientemente de la situación económica del culpable. Y es que imagina que una persona con escasos recursos destroza tu moto o te atropella. Sin el seguro obligatorio podrías tratar de cobrar, pero teniendo en cuenta que existen cantidades que no se pueden embargar en una nómina, es fácil que nunca terminases de recibir la indemnización.
La RC Obligatoria asegura el pago de las indemnizaciones hasta las cantidades antes indicadas.
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Con la ley en la mano es posible contratar un seguro que única y exclusivamente cubra la Responsabilidad Civil Obligatoria por las cifras mínimas, pero la realidad es que la mayoría de aseguradoras apuestan por ir un paso más allá.
La mayoría de seguros que puedes encontrar hoy en día incluyen coberturas adicionales a la RC Voluntaria que completan el seguro y que cubren no sólo a las terceras personas sino también a tu como piloto en diferentes grados. Por eso, se puede distinguir entre coberturas básicas y opcionales.
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Coberturas básicas
Las coberturas básicas son las que la aseguradora incluye ‘por defecto’ en todas sus pólizas pero que generalmente no impactarán en el precio del seguro.
Las coberturas básicas son ventajas que las aseguradoras te ofrecen para darte un mejor servicio y diferenciarse hasta cierto punto de la competencia. Entre las garantías más habituales figuran la reclamación de daños y la asistencia en viaje, aunque ambas dentro de ciertos límites.
Algunas aseguradoras incluso impondrán por defecto la cobertura de accidentes del conducto porque consideran que su seguro debe cubrir tus lesiones, sí o sí, tengas o no la culpa del accidente. La gestión y reclamación de multas también figura entre estas garantías obligatorias no por ley sino porque el seguro las impone.
Estas coberturas básicas o voluntarias pero obligatorias son el alma de tu seguro y lo que al final diferenciará los seguros a terceros de cada compañía.
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Coberturas opcionales
Las coberturas opcionales son voluntarias y las elijes tú. Es la forma en la que puedes personalizar el seguro y configurarlo a tu gusto. La mayoría de compañías organizan estas garantías en torno a paquetes para que les sea más fácil gestionar sus pólizas.
Entre los elementos voluntarios y opcionales de tu póliza de seguros puedes encontrar los siguientes elementos.
- Accidentes personales, en caso de no aparecer como cobertura básica.
- Servicio de grúa o una ampliación del mismo para abarcar más supuestos de los básicos.
- Importes de las indemnizaciones que pagará el seguro por fallecimiento e invalidez.
- Servicio de repatriación. Esta cobertura se activa si tienes que volver desde el extranjero por accidente y gracias a ella la aseguradora será quien se haga cargo del traslado.
- Servicio de chófer en caso de no poder continuar la marcha por el que la aseguradora te llevará a casa, a un hotel o a tu destino si tienes un problema que te impida seguir con tu viaje.
- Servicio de pintura del coche o moto. Hay seguros que incluyen la posibilidad de pintarte el coche o la moto cada tres años.
- Servicio de envío de documentos o medicinas al extranjero en caso de necesitarlas.
- Servicio de envío de llaves de repuesto si has perdido las tuyas y no las encuentras.
- Seguro de casco y equipamiento. Es habitual que se ofrezca la posibilidad de asegurar también todo el equipo motero, especialmente el casco.
- Pérdida de puntos del carnet. La compañía te pagará un curso para la recuperación de los puntos.
- Retirada del carnet. En este caso la aseguradora pagará un cursos para recuperar el carnet y además una indemnización por el tiempo que se esté sin él.
Estas son algunas de las coberturas opcionales más habituales, pero después cada compañía puede incluir las suyas propias. Por eso mismo es importante acceder al condicionado y ver que garantías obligatorias inlcuye el seguro, cuáles puedes elegir libremente y cuál es el nivel de cobertura que ofrecen.
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Cómo optimizar tu seguro de moto
Con el funcionamiento básico de los seguros en mente llega el momento de confeccionar el tuyo. El error típico del motero español al comparar su seguro es fijarse sólo en el precio y pensar que escoger el más barato es la única forma de ahorrar. Nada más lejos de la realidad.
Para ahorrar de verdad en el seguro de moto primero debes pensar qué coberturas son imprescindibles para ti y cuáles son accesorias. A partir de ahí tendrás que comparar las garantías que te ofrece cada seguro. Para que te hagas una idea, por apenas 10 euros de diferencia puedes pasar de un seguro básico a uno con asistencia en viaje.
Además, recuerda que puedes cambiar tu nivel de coberturas cada año y que es tan fácil como añadir o eliminar garantías opcionales a la póliza. Si por ejemplo llevas tu moto de un garaje a otro quizás no te interese incluir el robo parcial pero sí el total de tu moto.
La clave está en contratar sólo lo que necesitas.
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